5/9/10

Reset.


No tenía pensado escribir nada en estas fechas, siempre he tenido una escala de prioridades y escribir en este blog nunca ha estado entre las primeras. Pero me veo a un sueño de madrugar y lo último que me apetece es estudiar, así que he decidido desempolvar esta cuenta para escribir un rato.
En estos días he visto como van cambiando cosas en mí, quizás inconscientemente en este tiempo de estudio mi subconsciente lo ha dedicado para ir reflexionando sobre mi y sobre la vida, y creo que debo dar las gracias a mis tapones que me aislan de mirar a aquella chica cada vez que se levanta para hacer un descanso o para evitar que estudie con música y eche a perder la tarde pero me aprenda de memoria varios solos de guitarra. En ese aislamiento en el que sólo escucho mis pensamientos se han fraguado unas ideas que he estado aconsejando estos días precediendo a lo que cuento en este texto. Ahora, me he dado cuenta del valor y el significado de esas palabras, porque me he cansado de hacer siempre lo racional, lo maduro y lo sensato, y ahora sé que la próxima vez que pueda, no dudaré en suspender un examen por compartir momentos irrepetibles contigo, y muchos errores que tuve y espero no volver a repetir. No dudaré en hacer lo que de verdad siento en ese momento, porque ya conozco la sensación que provoca el haberme quedado con las ganas y no me gusta, y prefiero algo malo por conocer.
Porque no quiero ser el ejemplo de nadie, porque esa sensación de bueno hacia los demás se convierte en pringado para mi.

Seguramente leais extrañados estas frases pero es lo que hay, porque aunque me veais con esa tez de chico frio, racional, tranquilo e introvertido, también se encuentra una persona muy rayada con sus problemas y que siente como todos, y me atrevería a decir que más, pero que creó una fortaleza dentro y escondió la llave lejos de curiosos, incluso lejos de él, y ahora, en estos días que está solo en su acojedora y pequeña casa, se le hace grande y tiene que llenarla de pensamientos y amigos.
Ahora solo espero que esta reflexión no se me olvide, y para ello lo dejo aquí escrito.

No hay comentarios:

Publicar un comentario